3.- Pero lo pies no alcanzan

.


Templábamos con la calidez de algunas piedras soleadas
las inconveniencias del temblor en las manos
- miedo, frío y hasta vergüenza-


A ciegas fue que le creímos...

....Si hubiéramos sabido descifrar, durante las primeras asambleas,
alguna de aquellas vibraciones raudas en su voz
o los inesperados silencios que brotaban mansos
entre disertaciones, dudas y monólogos ...,
o, acaso, el espesante sahumerio de niebla y vacío
que iba obnubilando con falsas razones el blanco corazón de mi gente....

Si hubieramos adivinado algo ,
o a tiempo...

Pero la verdad ya estaba amoratándose cadáver
en el nicho mortuorio de su boca

Sólo una última intuición nos hizo comprender
la inevitable consecuencia de aquella muerte ambigua

¿Hasta dónde los pies alcanzan ?
No. Los pies ya no alcanzan
Hundidos en la memoria primitiva del superviviente acosado ...¡ corrimos!

Pero ahora nuevamente siento la pesadez oscura del sueño.
Los árboles comienzan a merodear mis percepciones
con hojas danzantes y ramas,
son como giros de baile opiáceos que inundan la consciencia
con tribulaciones de verde y misterio

¿ Será que regresó la primavera y la sangre va atemperando
sus impulsos de aire, sus ritos iniciáticos como sonoridades de agua ... ?
¿ O ...es aquel veneno dulce , el del estrafalario insecto que aguijoneó mi brazo
y al que perdoné la vida... ?

Sí. No hay duda. Es aquel veneno dulce.
Está penetrando lentamente en mi entraña
y con amabilidades de invertebrado me nubla la razón para llevarme...

Hágase pues,  sin demora, la ley universal en mi vientre,
alcancé así, sin dilaciones, las más altas claridades del cielo...



Rosa Iglesias
19 enero 2012